En la actualidad la tecnología ha revolucionado la odontología en sus técnicas y equipos. Los dentistas tratan muchos problemas bucodentales de una forma más rápida, menos invasiva y con un confort mucho mayor para el paciente.
Los avances tecnológicos influyen de manera muy positiva en la mejora de la salud bucodental.
Cámaras intraorales
Inventados a finales de los años 80, estos aparatos proyectan en una pantalla una imagen ampliada de la boca del paciente. Esta imagen es fundamental para que el dentista conozca de forma rápida el estado de la cavidad oral. Gracias a esta innovación tecnológica el paciente puede ver su boca.
Radiografía digital
El proceso de la radiología digital es más rápido que en una radiografía tradicional, por lo que tiene una menor exposición a la radiación. La imagen se transmite al ordenador de forma casi inmediata, el profesional puede ajustar el brillo y el contraste de la radiografía para ayudarse en el diagnóstico.
El Consejo General de Dentistas informa que en la radiología se puede detectar caries, la enfermedad periodontal y posición maxilares.
Otra de sus ventajas es que la radiografía digital puede comparar imágenes tomadas en distintos momentos de la vida del paciente.
Láser
El láser se está empezando a usar en la odontología, sobre todo, en el tratamiento periodontal para corregir la forma de las encías o eliminar un exceso de tejido gingival.
TAC dental
Una prueba que ha revolucionado la implantología en los últimos años, es el TAC dental o tomografía axial computerizada. Es indolora y determina si el implante se colocará en el maxilar o en la mandíbula.
El TAC dental reduce los tiempos desde el diagnóstico hasta que al paciente se le coloca el implante. Ofrece una imagen tridimensional de la boca del paciente, y gracias a un sistema de coordenadas, el dentista puede conocer la cantidad de hueso de un punto concreto de su maxilar.
Ventajas de la tecnología 3D en los tratamientos dentales
La tecnología 3D aplicada a la odontología conlleva ventajas en el tiempo, coste y calidad de un tratamiento dental. Con ella se puede realizar: prótesis en menor tiempo, cirugía sin incisiones ni suturas, la restauración 3D y tratamientos de ortodoncia.
Los pacientes tienen un tratamiento personalizado y que se ajusta a sus necesidades, por lo que los márgenes de error son inferiores. La tecnología 3D incrementa la precisión en cada diagnóstico y tratamiento. Además, los procesos son menos invasivos y garantiza la comodidad de los pacientes.
La Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (FENIN), informa que si la clínica es tecnológica sabes que la manera con la que te van a hacer el tratamiento va a ser más eficaz, más eficiente y con menos dolor.
Es una gran ventaja, ya que los pacientes no desean sufrir dolor durante su visita al odontólogo. En cuanto al aspecto económico, el coste de los procedimientos disminuye, porque se simplifican los procesos.
Los tiempos de espera del paciente también se reducen, ya que algunos tratamientos se realizan en menor tiempo. La tecnología 3D mejora la calidad de vida del paciente y supone un cambio de mentalidad para adaptarse a los nuevos tiempos.
Los avances tecnológicos continúan
En los últimos años los avances en la Odontología no ha parado de crecer, como los implantes y las ortodoncias invisibles. La tecnología bucodental ha creado un cepillo de dientes para las personas con problemas de movilidad.
Tiene un cabezal de doble cara que limpia a la vez la cara interna y externa de los dientes. Es el único en el mundo, que permite un cepillado sin esfuerzo gracias a su cabezal independiente del mango, que permite un movimiento de 180 grados, con un ángulo constante de 45 grados.
El cepillo se le conoce con el nombre de Balene, también incluye un nuevo material para la fabricación de las cerdas, que sustituyen el nailon tradicional por el Tyflex, un elastómero hidrófilo que por su composición elimina el 99,9% de las bacterias que habitan en las cerdas.
Su creador es Paul Victoria Mancy, era el responsable de salud oral y director de Marketing para Europa en la farmacéutica GSK, se le ocurrió crear este cepillo porque al volcarse en el cuidado de sus padres, enfermos de cáncer, descubrió que una de las mayores dificultades a la hora de cuidar a personas con poca movilidad es la limpieza de la boca.
Los cepillos Balene permiten una limpieza dental en un tiempo menor que con un cepillo de cerdas de nailon. La Asociación Dental Americana informa que el tiempo recomendado de limpieza es de dos minutos, pero Balene es eficaz en tan solo 40 segundos de cepillado.